De Ripoll al hostal de “la Corda”

Antiguo hostal del municipio de Olot, instalado en una gran masia del siglo XVII. El 26 de marzo de 1875, tuvo lugar la entrevista secreta de los generales Arsenio Martínez Campos y Francesc Savalls.

La correspondencia de España. Crónica de Cataluña del dia 03-11-1875

Olot, 27.-Por el cable habrá llegado á la redaccion de la Correspondencia el despacho que ayer mañana envié á Barcelona desde Ripoll anunciáodole la captura de dos cañones Krup y dos obuses de bronce, verificada en las inmediaciones de aquel punto en la mañana del espresado dia. Los Krups eran los cogidos por los facciosos en Castellon de Ampurias este año pasado cuando la pequeña columna de Moya, agotadas ya sus munioiones, se vió envuelta por fuerzas quintuplicadas y tuvo que refugiarse con grandes pérdidas en Figueras. Los obuses procedian de Agramunt, donde los hallaraon tambien los carlistas el pasado año. No quedan ya á los facciosos mas que dos cañones lisos de montaña que tienen escondidos y que se espera encontrar, pues se sabe hasta donde los ocultan.
La captura de las espresadas piezas se ha verificado por el teniente de la escolta del general en jefe, señor Borri y Saenz de Tejada, el cual salió de Ripoll á las tres de la madrugada con 40 infantes, l0 caballos, algunos voluntarios y la persona que designó al general el punto donde se hallaban enterradas las piezas.
Las piezas estaban enterradas en un campo sembrado y á cinco palmos de la superficie, donde no alcanzaba el arado. Apenas amaneció los soldados comenzaron á esplorar el terreno con las bayonetas y los voluntarios con palas que llevaban al efecto: al fin se dió en duro y bien pronto se descubrió un cañon, luego un cierre y consecutivamente todo lo que se buscaba. La algazara de los soldados fué grande y embargadas unas carretas de los próximos caserios se pusieron en ellas las piezas y fueron cónducidas á Ripoll. Como el teniente señor Laserta, tambien de la escolta, descubrió el dia antes las cureñas, los cañones y obuses quedaron montados ayer mismo en Ripoll: unos y otros se hallan en muy buen estado.
Bajo la impresion de este agradable suceso salimos de Ripoll en la mañana de ayer con direccion á esta pintoresca villa de Olot. Venian con nosotros algunas compañias de cazadores de Barcelona, por si el enemigo intentaba hacer alguna de las suyas en las terribles posiciones que le ofrecia el camino. Este era de lo mas deplorable que puede imaginarse: figúrese el lector un barranco de tres ó cuatro leguas dominado á la derecha por la elevada sierra de la Magdalena y á la izquierda por la que le separa de San Juan de las Abadesas : las posiciones eran verdaderamente inespugnables: el camino un sendero cuajado de peñascos, donde apenas se podia ir al paso, y el territorio que abarcaba la ansiosa mirada una selva de pinos, donde no se oia resonar la voz humana, ni apenas se veian señales de existir el hombre.
Por aquel camino deplorable fuimos cerca de cuatro horas, que al fin divisamos el negro y sombrio torreon de Vallfogona, punto de prision de la mayor parte de aquellos infelices, que en numero de mas de 200 fueron fusilados per Saballs, los unos en el cementerio del mismo pueblo los otros en Llaers.
El recuerdo de aquella hecatombe á la vista del sitio donde se preparó y llevó á cabo en parte, produjo en mi alma un sentimiento de profunda tristeza: ¡pobres mártires de la patria! ¡pobres victimas de la saña de nuestros enemigos¡
El cura y el ayuntamiento de la poblacion salieron á saludar al general en jefe que les contesó dos palabras, y sin querer enterarme de lo que habian dicho, me dirigí á saludar al bravo coronel Fuentes, ayudante del señor Martinez Campos, que nos esperaba allí con el batallon de cazadores de Llerena. Quedáronse con él las compañias que vinieron con nosotros y despues de un breve descanso continuamos la marcha con la escolta, acompañados del ex-alcalde de Olot señor Deu, que tan bizarramente se condujo al ser atacada esta poblacion por los carlistas. Poco despus de las cuatro llegábamos aquí.
Antes de dar cuenta de la entusiasta recepcion que ha hecho esta villa al que con justicia llama su libertador, debo relatar un incidente digno de ser conocido en España entera. A una media legua de esta poblacion hállase un hostal llamado de la Corda, , célebre en este pais por habar sido donde el general Martinez Campos tuvo una conferencia con Saballs, de la cual debia salir, segun,los deseos de nuestro general, la humanizacion de la guerra, y de la cual solo salió el convencimiento de que el sanguinario cabecilla no haria nunca la guerra con las condiciones que se hace en todo pueblo civilizado, pues Saballs se negó á renunciar á su sistema de terror, á fusilar paisanos sin forma alguna de juicio, y todo lo demás que constituia sus procedimientos.
Al llegar á aquel punto el señor Martinez Campos tuvo la natural curiosidad de ver de nuevo la estancia en que se verificó la conferencia. Hizome subir con él y ciertamente merecia la pena de verse. Era un cuadrilongo de 21 piés de largo por 28 de ancho, en cuyo centro hallábase una mesa de pino larga y estrecha ( 10 cuartas por 3 ) y a ambos lados dos bancos de igual longitud. Allí fué donde ambos generales, hallandosé á la vista ámbos ejercitos, celebraron la espresada conferencia y donde, como si no hubieran sido enemigos, aceptó Martinez Campos el refresco que Saballs le habia, hecho preparar.,
Martinez Campos fué tratado por Savalls con la misma cortesa con que el, hostelero le trataba, ayer: con la única diferencia de que este daba su vino y sus refrescos por dinero y Saballs los daba por cuenta agena. Efectivamente, al bajar el general, el hostelero, al cual hubo de dirigir algunas palabras recordatorias del caso, esclamó con el acento del que está herido por una mala pasada:
-Pues no sabe V. E, lo mas triste: fué que Savalls se á negó á pagarme el refresco que me mandó preparar para todos: ¡á mí que so un pobre!.
Una carcajada de todos los circunstantes, acompañada de algunas esclamaciones significativas fué la contestacion á esta revelacion tan preciosa como inesperada. Martinez Campos alargó al pobre hombre una moneda de cinco duros, y quedó probado que no se puede aceptar de los carlistas ni aun los obsequios.
Como he indicado mas arriba y comunicado por telégrafo, el general Martinez Campos ha tenido una recepcion entusiasta en esta poblacion.

Hemeroteca BNE

BNE

Cançó de l’hostal de la Corda

El claustro de Santa Maria de Ripoll VII. Jordi de Déu, el esclavo del maestro Cascalls.

Las piedras explican las historias que tus ojos dibujan

Capitel de escultura completa, casi exenta, en la confluencia de las galerías sud-occidental y sud-oriental, siglo XIV. Obrada en el taller de Jordi de Déu bajo el abadiato del abad Ramon Descatllar i de Palasol ( enero 1387 – septiembre 1408)

“A 9 de febrero de 1390, por contrato con maestro Pedro Gregori, cantero de Perpiñán, este se obligaba llevar 56 columnas de la mejor piedra de Vilafranca del Conflent, trabajarlas y pulirlas por el precio de 330 florines de oro de Aragón. A 11 de mayo siguiente, maestro Jordi de Déu, escultor de Barcelona, se comprometía trabajar por 150 florines, 50 capiteles con figuras, 28 bases y 28 cornisas, piezas todas bien acabadas como las que ya había ejecutado maestro Colí en la galería de poniente” .

La corta noticia conservada por el monje Olzinelles del contrato con Jordi de Déu nos hace saber que los capiteles debían ser con figuras, tales como los obrados por el maestro Colí en la galería de poniente. En esto se adivina la idea de los monjes en la continuación del claustro, que lo querían que resultara armónico del todo con la galería primitiva, y a ella en definitiva se adaptaron los escultores, saliendo airosos de los ábacos que en la galería superior de el abad Besora les resolvía ya el conflicto, y acomodándose como pudieron en los capiteles, sin suficiente espacio para figurar ciclos historias en serie tal como amaba la época, y recurriendo a resolverlos figuradamente a la manera que podrían haber resuelto una confrontación de dos cartelas. Artísticamente la obra escultórica resulta más exitosa en la galería de poniente, intervenida por el maestro Colí, y mucho más pesada y floja en la galería de levante y en cambio los temas vegetales son de una gran riqueza y finura de entrelazados en la galería septentrional que, según los contratos, resulta ser obra del maestro Jordi de Déu.

Notas inéditas sobre el monasterio de Ripoll. Eduard Junyent

 

La conservadora del departamento de Arte Gótico del Museo Nacional de Catalunya, Mª Rosa Manote en su tesis doctoral dice: Notable escultor de los siglos XIV y XV. Nacido en Mesina de familia griega. En una reseña biográfica se indica que fue capturado por un corsario catalán, mientras que en otra no se confirma tal hecho y sólo se menciona que los mercaderes catalanes solían acudir a fines del siglo XIV a Marsella a comprar esclavos de origen griego.
En Barcelona lo adquiere el escultor real Jaume Cascalls de quien aprendió el oficio. Mientras fue esclavo no tenía apellido y se hacía llamar Jordi de Déu.

Artistas esclavos

Emma Liaño Martínez en “ Jordi de Déu, un artista siciliano al servicio de Pedro El Ceremonioso”: Los términos que nos informan de estos aspectos fundamentales de su biografía son claros y escuetos. En un documento de 1377 el rey reclamaba a Georgio de Deo, greco…, que se hallaba en Cervera, para que ayudase a Jaume Cascalls en la terminación de unos «oratorios» que el anciano escultor había dejado sin terminar en Poblet. Un año más tarde, con motivo de los pactos efectuados con Bernat Pintor, para establecer una sociedad de colaboración profesional, el propio Jordi de Déu afirmaba ser maestre de images e de pinzel…, de la ciutat de Mecina…Y de nuevo el monarca, con sus requerimientos, alude a su baja condición social el 25 de febrero de 1377, con motivo de los citados «oratorios»: …que encontinent facats partir lo dit maestre Jacme ab lo seu esclau, qui es abte en aytals obres…, e incluso a propósito de los sepulcros de los infantes: …e con sapiam be que en aqueixes partides no ha persona tan abta a fer les dites tombes con Jordi, qui fou esclau de mestre Johan (sic) de Castays,….
No sabemos cómo fue sometido a esclavitud. Aunque la mayor parte de los esclavos que llegaban a Cataluña en la Baja Edad Media procedían de un lucrativo comercio, la llegada de Jordi de Déu al taller de Cascalls puede deberse más a razones bélicas que comerciales. Y, en concreto, a la intervención de las tropas de la Corona de Aragón a favor de Federico IV de Sicilia, hermano de Leonor, la tercera esposa de Pedro el Ceremonioso, cuando precisamente la ciudad de Mesina, punto vital del paso del estrecho, gestionó la llegada a la isla de la reina Juana de Napóles.

Jordi de Déu, un artista siciliano al servicio de Pedro el Ceremonioso

 

POTAJE DE LEGUMBRES CON BACALAO

INGREDIENTES
150 gramos de garbanzos, 150 gramos de lentejas,
150 gramos de alubias blancas, 150 gramos de bacalao,
100 gramos de arroz, 2 huevos cocidos,
1/2 cebolla, 2 dientes de ajo,
perejil, pimienta, aceite, sal.

PREPARACIÓN
Las alubias y los garbanzos deben remojarse desde la noche anterior. En una cazuela grande se
cuecen las alubias cubiertas con agua caliente, además de los garbanzos, las lentejas y una
ramita de perejil picado.
Entretanto, se asa el bacalao a la plancha, se le quitan después la piel y las espinas y se
desmenuza. Cuando las legumbres estén tiernas, se añaden el bacalao y un sofrito preparado con
los ajos y la cebolla picados muy menudos.
Cuando rompa el hervor, se agregan el arroz, un poco de pimienta y se rectifica el punto de
sal. Se mezclan bien todos los ingredientes y se cuecen hasta que estén en su punto. Antes de
servir, se deja reposar el potaje unos minutos y se adorna con los huevos cocidos picados.

La cocina de los conventos

Bibliografia:
– Jordi de Déu i l’italianisme en l’escultura catalana del segle XIV. Pere Beseran i Ramon. Ed: Diputació de Tarragona
– L’escultor de Déu (novel·la). Vicenç Aguado. Editorial Gregal

 

Repoblamiento de Ripoll 1840 – 1900

El Padrón de 1840 nos habla de los primeros lugares que fueron habilitados para revivir Ripoll, se encontraban en la zona de la Almoina, el Molino, el Prat, la Farga y las calles dels Valls, Doña Estasia, la Plaza Nueva y el Mercadal . En total fueron 111 familias las que empezaron a levantar de nuevo el pueblo.
Progresión de la demografía de Ripoll hasta 1900:

1840 ………………………….. 901 vecinos, aproximadament  mitad hombres mitad mujeres
1841 ………………………… 1054 vecinos
1842 ………………………….. 805 vecinos
1845 ………………………….. 908 vecinos
1846 ………………………….. 895 vecinos
1854 ………………………… 1.729 vecinos
1857 ………………………… 2.424 vecinos
1860 ………………………… 2385 vecinos
1877 ………………………… 2.680 vecinos
1887 ………………………… 3584 vecinos
1900 ………………………… 5037 vecinos

Datos extraídos de los padrones y censos conservados en el Arxiu Comarcal del Ripollès

El claustro de Santa María de Ripoll VI

Las piedras cuentan las historias que tus ojos dibujan

Escarola, capitel de la galería sudoriental, siglo XIV. Obrada por el taller de Jordi María bajo la abadiato del abad Ramon Descatllar y de Palasol (enero 1387 – 09 1408)

La escarola se cree que tiene su origen en el Mediterráneo, expandiéndose en el siglo XIII por el resto de Europa, por estas fechas se empieza a cultivar la variedad rizada en Catalunya (la que muestra el capitel).

Ensalada de escarola, granada y trucha ahumada:
Una ensalada ligera, rápida de preparar y de buena presentación por el contraste de la granada con la escarola. La dulzura de la granada contrasta perfectamente con la ligera amargura de la escarola.
Se puede aliñar con una ligera vinagreta, donde el limón sustituye el vinagre.

200 gramos de escarola.
2 filetes de trucha ahumada
1 granada
El zumo de medio limón
4 cucharadas soperas de aceite de oliva virgen extra.
Sal.

Sustituyendo la granada por una naranja tenemos una fiesta de cítricos.

La cocina andalusí

Francesc savalls y el urbanismo

Se cuenta que estando un día Savalls en la pared del huerto de casa Budallés, viendo la carretera de Ribes justo a mano, juró que sus tropas no harían aquel gran rodeo para ir de la carretera al Corral. A continuación envió a buscar al alcalde, mandándole, bajo pena de pasarlo por las armas sí no cumplía, que hiciera derribar inmediatamente la casa de la Colecta y procurase la apertura completa del Ramal. Al día siguiente ya se derribaba la casa .
Para este negocio, Savalls no podía contar aquí con persona más adecuada que el comandante militar de la Villa, el famoso Don José Cossetti, más conocido por Don Pepe, o Pepe, como le llamaban sus amigos. Este personaje, italiano de nación, era muy aficionado a la policía urbana. Mandaba rebozar las fachadas nuevas, repintar las viejas, cerrar sitiales y otras mil cosas de incumbencia de la autoridad civil que él se otorgaba por completo.
A la vista tenemos una copia del oficio fechado a 20 de mayo de 1874 y dirigido al Párroco, mandándole «en uso de las facultadas que me están conferidas por el Exmo. Sr. Marqués de Alpens que no se oponga de ninguna manera a la apertura del Ramal, que debía atravesar la huerta de la rectoría; la contestación del Párroco, diciendo que no pondría ningún obstáculo y pidiendo la debida indemnización, y la contestación de Pepe manifestando que lo encuentra bien y que ya lo comunicara al Sr. Marqués de Alpens (Savalls).
En sesión 7 de agosto de 1879, el teniente de alcalde Josep Raguer, hace presente la conveniencia de legalizar la situación, consignándose en acta y participando al Gobernador Civil la apertura de la calle, hecha por la Autoridad militar carlista, pidiendole, demás, el poder enajenar las pequeñas parcelas que habían quedado.
De esta calle la gente decía, y dice todavía la mayoría, el Ramal, por ser un ramal de la carretera de Ribes, hoy primer trozo de la de Ripoll a San Juan. El rótulo llevaba también, Calle del Ramal.

Scriptorium nºII, Febrero de 1923

Los hechos de marzo de 1873, asedio y caída de Ripoll, daños colaterales

En 1873, durante la tercera guerra carlista, la iglesia de San Eudaldo, donde había siete u ocho carabineros parapetados, fue atacada e incendiada, causando la desaparición de la virgen que habían bajado del Catllar. También desapareció el primer altar a mano izquierda, dedicado a San Cristóbal.

L’església de Santa Maria del Catllar. Ripoll.
Jordi Colomer i Salomó
Col·lecció redescobrir el patrimoni, nº1

El claustro de Santa María de Ripoll V

Las piedras cuentan las historias que tus ojos dibujan

Tritón y tritonisa, capitel de la galería nororiental obrada por el taller del maestro Colí de Marville el siglo XIV, bajo el abadiato de Ramon Descatllar y de Palasol (enero 1387 – 09 1408)

 

Las sirenas y el pecado.
Tres de las cuatro galerías del claustro muestran sirenas, dos en la galería Románica del siglo XII, una en la galería del taller del maestro Colí y una en la galería del maestro Jordi de Déu.
En la galería románica se muestran los dos tipos arcaicos, la mujer-pájaro y la mujer pez. En el románico un grupo de sirenas-pez se representan con cola bífida que sujetan con ambas manos. Pueden llevar instrumentos musicales que aluden a su canto mortal entonado con su voz cautivadora, también pueden sujetar algún pescado o gran caracola haciendo alusión al medio acuático en el que viven. Y a partir del gótico su atributo más común fue el espejo y el peine dando lugar al tipo iconográfico de las sirenas coquetas, porque el peine actuaba como símbolo de la seducción femenina y el cabello era un medio de seducción.
La sirena-pez, con la parte inferior pisciforme y cola única tuvo como modelo las tritonisas, compañeras de los tritones. Su aspecto es más seductor que el de las sirenas-pájaro y es por ello por lo que éstas están asociadas a los símbolos demoníacos, mientras las pisciformes se vinculan a la lujuria.

Las sirenas Laura RODRÍGUEZ PEINADO Universidad Complutense de Madrid Dpto. Historia del Arte Medieval

Empanada de trucha de rio

masa:
harina
un poco de levadura
aceite
sal

Para el relleno:
1 o 2 truchas según tamaño
4 huevos
aceite
1 cebolla
mantequilla para untar
1 yema de huevo
leche
sal pimentón
azafrán
cilantro

Se limpia el pescado, lo hervimos al vapor o en agua y sal (y especias, si se quiere) y desmenuzamos su carne reservándola. Se rehoga una cebolla muy picada con un poco de aceite hasta que quede transparente y se retira.
En una cazuela (mejor de barro) se baten los huevos, se añade la cebolla rehogada y las especias. Se bate todo bien tapando la cazuela. Para hacer la masa mezclamos en un bol un pellizco de sal y levadura, 3 tazas de harina de trigo y un chorro de aceite.
Después, vamos echando agua poco a poco, removiendo hasta obtener una bola que no se pegue a los dedos. Esta masa la dejamos reposar una hora y media en un bol con un paño húmedo por encima. Se parte en dos esta masa y se amasa y estiran ambas piezas con un rodillo haciendo dos láminas una mayor que la otra. En una fuente para hornear engrasada con mantequilla ponemos la masa estirada de mayor tamaño adaptándola a la forma de la fuente.
Rellenamos esta masa con el preparado de pescado que teníamos reservado de manera uniforme. Cubrimos este relleno con la otra masa cuidando de pegar bien los bordes y haciéndole unos orificios con un tenedor. Finalmente, metemos nuestra empanada preparada dentro de un horno precalentado a 200º grados de temperatura durante 45 minutos.

La cocina andalusí

 

 

 

Los hechos de marzo de 1873, asedio y caida de Ripoll, segun la prensa de la época VII

En uso de nuestros derechos indescriptibles ilegislables, mientras Los DESCAMISADOS declaran siguen la guerra a Dios, a la familia y a la propiedad, guardándose La Discusión de decirles ni siquiera que comprometen a la República, tomamos de los periódicos liberales, las siguientes

NOTICIAS CARLISTAS.
CATALUÑA.
Por de pronto véanse los siguientes interesantísimos detalles sobre la toma de Ripoll, que un oficial de Savalls dirige a un periódico de Barcelona.
“Ripoll 22.
Querido amigo D. Nicolás: Después de tomar un café, saboreando un veguero de tres cuartos en compañía de varios oficiales, tomo la pluma para comunicarle la grata noticia que en este mismo momento rompe el fuego nuestra artillería distinguiéndose por sus certeros tiros el cañón Alfonso, que bate el fuerte llamado cuartel, defendido por unos 120 carabineros.
Nuestros Voluntarios se baten como nunca.
Los enemigos no saben hacer otra cosa que admirarlos.
Se han rendido ya los de la iglesia y no tardarán en hacerlo los demás.
Nos dicen que doña María de las Nieves no consiente que nadie sirva a los heridos, siendo sola la que les proporciona cuanto piden.
Los Voluntarios la victorean calurosamente. No tengo más tiempo. Su amigo,— Joaquin Martín.-”

TRES VICTORIAS.

Amigo D. Nicolás: Escribía V. desde el café de Ripoll, y vuelvo hacerlo desde este punto para darle cuenta de las tres victorias a1canzadas por nuestros bravos Voluntarios.—Unos 600 hombres, al mando de S. A. Don Alfonso, nos dirigimos a Ripoll con intención de dar el asalto.—Tomamos posiciones, y esperamos la llegada de SS. AA. para atacar. – A las doce del día 21 se recibió la orden , y después de algunos disparos, mandó el general de artillería, don Francisco Savalls, cargar a la bayoneta sobre la fuerza que había en el puente de entrada del pueblo.—El enemigo no resistió la carga , y se encerró precipitadamente en los fuertes.—Dueños nosotros del resto de la población, colocada la artillería en los puntos convenientes, consiguieron rendir a discreción a los fortificados en la iglesia, defendiéndose los del cuartel y una casa hasta el día siguiente, hora dos de la tarde, en que también, a discreción, se vieron obligados a rendirse.—Nos apoderamos de unos 300 fusiles Remington, 14 cargas de municiones y otros pertrechos de guerra, y nos retiramos, porqué una columna venia en su auxilio.—Esta es la primera victoria.
Tan pronto como pusimos los prisioneros fuera del alcance del enemigo, tomamos posiciones para esperar la columna, la que no se hizo esperar. Se rompió el fuego, y a las cinco de la tarde encerraron en Ripoll, de donde no creo que vuelva a salir.—Esta es la segunda victoria.
La tercera la consiguió pundonoroso y valiente Galcerán, batiendo a otra columna , que encerró en Vich, no sin haberla dispersado y cogido una compañía entera.—Tenemos que lamentar, del ataque de Ripoll, dos muertos y muchos heridos, de la segunda acción un muerto y cinco heridos, y de la de Galcerán, o sea la tercera, no sé otra cosa que la sensible herida del jefe Galcerán.
El consejo de guerra condenó muerte a 10 carabineros por habernos hecho una traición. Después de poner bandera blanca en señal de parlamento, cuando se aproximaban los nuestros para hablar, les hicieron una descarga, matando e hiriendo a dos. A los demás los guardamos con todas las consideraciones en número 140 hombres. Según la conducta del enemigo obraremos.
No tengo, más tiempo afectísimo amigo, Joaquín Martin.
P.D. Doña María de las Nieves curando heridos durante el asalto de Ripoll. Yo le vi servirles las medicinas y escuché las palabras cariñosas y consoladoras que les prodigaba. Después de habitación en habitación recorría continuamente por si alguno se quejaba. Los Voluntarios la victorean.
En el ataque el enemigo y los nuestros han hecho heroicidades que admiran.
De Berga no hay más pormenores que los que dimos ayer en el Suplemento.
Sobre la acción de la Gleva, que recordará siempre a todos los buenos con la mayor aflicción la muerte de Galcerán, nos parece que no pueden decir más las dos cartas que insertamos del Diario de Barcelona.

MOYÁ 27 de Marzo.
Volvemos estar visitados por los carlistas.
Ayer, a las cuatro de la tarde, llegó Guiu con su partida, fuerte de unos 200 hombres, entre los que figura gente nueva de la que se les va incorporando diariamente. En cambio se echan a faltar en ella algunos de los primitivos que han pasado a los Guías de D. Alfonso. Vienen muy satisfechos de la acción de la Gleva, cuya victoria se atribuyen.
También ha venido el recaudador de contribuciones para exigir un nuevo trimestre de…… que se ha llevado unos 40 duros.

VICH 26 de Marzo
Un grande acontecimiento acaba de tener lugar en el teatro de la guerra. Galcerán ha muerto de resultas de la reacción sobrevenida a la herida que recibió en la parte inferior del muslo y que le subió, por estar sentado en la silla del caballo, hasta el bajo vientre, interesándole alguna entraña principal. Los carlistas han perdido un buen jefe, pues todos los oficiales que le vieron en la acción del 23 hicieron los mayores elogios de su pericia militar. El distrito del Llusanés ha perdido un amigo, porque amaba aquel país y le defendía contra las exacciones inmotivadas de otras partidas, y los liberales se han librado de un enemigo temible. Sus restos descansan en San Quirze de Besora, siendo su entierro la causa, según se dice, de que los artilleros de Conanglell hayan podido retirarse esta mañana con toda tranquilidad aquí abandonando un establecimiento que no les ofrecía bastante seguridad.
La batalla del domingo, aunque no tan mortífera, como decía el telegrama publicado por V., es ante todo muy importante por la muerte del jefe que la dirigía, siendo quizás el único o uno de los muy pocos fallecidos carlistas, pues el herido que está aquí vive aún, a pesar de que me habían asegurado que había muerto.
Según se dice, jugaron en la acción ocho cañones, seis salidos de aqui y dos de Conanglell; merced a esto la tropa no sufrió una derrota más o menos fuerte, como de seguro hubiera sucedido, por el desorden con que obraba por falta de oficiales, según ellos mismos confiesan con una ingenuidad que les honra.
Sin añadir ni quitar coma, voy a continuar algún dato que acaban de comunicarme, procedente de un hombre que acaba de llegar de Ripoll. Es el que habla.
Las bajas de los carlistas en la acción de Viñolas fue de 19 hombres, 2 muertos (ahora 3) y 13 heridos. De tropa hay muchos muertos, algunos heridos y pocos prisioneros; a no ser la artillería, que trabajó denodadamente, y el refuerzo de Conanglell, la tropa hubiera quedado muy maltratada por la confusión que reinaba en la misma por la falta de jefes y el orden con que pelearon los carlistas. Galcerán fue encontrado muerto ayer a las seis de la mañana, cuando pensaban que descansaba, sin recibir los sacramentos; pero lo había verificado el domingo con muchos individuos de su partida antes de empezar la acción. Mañana se celebrarán los funerales en Prats, donde concurrirán unos 3.000 carlistas, incluso D. Alfonso, quien ha sentido su muerte.
Larramendi se encargará del mando de su partida. Las bajas de los carlistas en Ripoll han sido de 19; no es cierto que sea muerto el hijo de Barrancot: el que murió a consecuencia de la descarga dada por la guarnición de San Eudaldo, después de sacada la bandera blanca, que un francés zuavo, persona muy valiente y estimada entre los suyos. Los carabineros fusilados por aquel acto son 10. En San Eudaldo han sufrido mucho por las llamas el órgano y el altar mayor; entre los carabineros había una mujer.
Las tropas de Savalls recogían los fusiles Remington cambiándolos por los suyos; además de un centenar de aquellos cogieron 200 más y muchas municiones.
De otro hecho de importancia nos da noticia las siguientes líneas de La Imprenta, archirepublicana de Barcelona:
«Anteayer se recibió en esta ciudad un parte de Vich anunciando que la escasísima guarnición de artilleros de Conanglell se hallaba en graves apuros a causa de hallarse circunvalada de todas las facciones de la provincia de Gerona en número de 3.000 hombres. Ayer se recibió otro telegrama manifestando que la situación de Conanglell había empeorado a causa de no haber llegado refuerzos. A consecuencia de esto, a las primeras horas de la tarde de ayer salió una fuerte columna en dirección a Vich. Ojalá que pueda llegar a tiempo. Conviene hacer constar que de Conanglell se retiró ya tiempo atrás el ganado de la remonta y todo el material, de manera que la presencia de unos cuantos artilleros aislados en Conanglell, en donde eran completamente innecesarios, sólo se explica por el desbarajuste que hace algún tiempo reina en las operaciones militares. Por esté motivo sería mucho más lamentable la rendición del punto de Conanglell, que algunos suponían anoche realizada ya».

Article de “La Esperanza” 31-03-1873

Los hechos de marzo de 1873, asedio y caida de Ripoll, segun la prensa de la época VI

Madrid 25 de marzo

Escasa son las noticias que puedo hoy comunicar a ustedes, por que indudablemente, desde que los gorras de pelo abandonaron el Congreso, la nación está que ni una balsa de aceite, y sin la cuestión carlista que preocupa grandemente al gobierno y a todos los buenos republicanos, podría decirse que ha mejorado el estado del país; mas es imposible negar que la noticia del ataque a Ripoll y los horribles asesinatos cometidos por el bárbaro Savalls, han impresionado dolorosamente a toda la población, porque revela la audacia de las fuerzas carlistas, adquirida por causa del estado de abandono por que la nación pasó a causa de la debilidad del gobierno, producida por el estado de la Asamblea y las continuas algaradas de los radicales.
Todo el que tiene conocimiento del estado de Cataluña, sabe que las piezas de artillería con las que se han presentado delante de Ripoll los carlistas, pasaron por la frontera francesa, cerca del pueblo de Terrades antes de la proclamación de la República, producto del abandono en que ha tenido los negocios de España don Salustiano Olózaga, ocupado solo en hacer calendarios sobre la República Federal, trasmitirlos telegráficamente al gobierno, y estar al corriente de las novedades culinarias con que enriquece su repertorio de los grandes cocineros europeos.

Articulo “La Independencia” 27-03-1873