Guerra hispano-estatunidenca. Crònica de la guerra II

U.S.S. Iowa

Los buques yankees continúan apresando algunos barcos mercantes y bloqueando varios puertos de la isla de Cuba. Tres acorazados norteamericanos bombardearon durante media hora la ciudad de Matanzas, sin causar el menor daño en ésta ni en las fortificaciones: este bombardeo, realizado sin el aviso previo que las leyes internacionales exigen, ha motivado una reclamación de los cónsules de Austria y Francia. También intentó la escuadra enemiga bombardear Cienfuegos, pero los tres buques encargados de esta misión fueron rechazados por tres cañoneros españoles que les obligaron á retirarse. La cañonera Ligera causó en aguas de Cárdenas averías graves al torpedero yankee Cushing que reconocía aquella costa. La escuadra española ha salido de Cabo Verde.

La Ilustración artística, Barcelona 9 de mayo de 1898

Guerra hispano-estatunidenca. Crònica de la guerra I

La gravedad de la situación por que España atraviesa y el interés que ofrecen las noticias que se relacionan con la actual guerra con los Estados Unidos, nos han movido á inaugurar en LA ILUSTRACIÓN ARTÍSTICA esta nueva sección, en donde iremos relatando semanalmente los principales acontecimientos de la lucha a que de un modo tan artero cuan injusto hemos sido provocados.

Apenas comenzó hace poco mas de tres años la insurrección cubana iniciada en Baire, los menos versados en asuntos internacionales hubieron de ver que los verdaderos enemigos de España no estaban en Cuba, sino en los Estados Unidos; que los Máximo Gómez, los Maceo y demás jefes insurrectos contaban para el triunfo de su causa en primero y casi en único término con el apoyo de los norteamericanos; que el alma de la rebelión no debía buscarse en el pretendido gobierno de la manigua, ni siquiera en las juntas laborantes de Cayo Hueso, Tampa, Nueva York y Wáshington, sino en Casa Blanca y en el Senado y el Congreso yankees.

De los Estados Unidos salían , á ciencia y paciencia de las autoridades, continuas expediciones con hombres y pertrechos de guerra para los filibusteros; en el Parlamento americano se vomitaban con punible tolerancia del gobierno los más soeces insultos contra nuestros heroicos soldados, mientras se encomiaban con entusiasmo los crímenes de los insurrectos; y el ministerio de Negocios Extranjeros no cesaba de enviar á nuestro ministerio de Estado notas y reclamaciones por supuestos perjuicios que se traducían siempre en tantos ó cuantos miles ó millones de dollars.

La Ilustración artística, Barcelona 2 de mayo de 1898

S’ha acabat la guerra

BOPG dilluns 29 Agost 1898
PRESIDENCIA DEL CONSEJO  DE MINISTROS
Real decreto
En cumplimieato de lo estipulado en el art. 4.º del Protocolo firmado en Washington el día 12 del corriente mes de Agosto por Mi Plenipotenciario y el de los Estados Unidos de América; de acuerdo con el parecer de Mi Consejo de Ministros;
En nombre de Mi Augusto Hijo S. M el Rey D. Alfonso XIII, y como Reina Regente del Reino, Vengo en nombrar Comisarios para convenir y ejecutar los detalles de la evacuación de la isla de Cuba á D. Julián González Parrado, General de División; D. Luis Pastor y Landero, Contraalmirante, y el señor Marqués de Montoro, y para convenir y ejecutar los detalles de la evacuación de la isla de Puerto Rico y de las demás islas que se encuentran actualmente bajo la Soberanía de España en las Antillas á Don Ricardo Ortega y Diez, General de División; D. EugenioVallarino y Carrasco, Capitán de navio de primera clase, y D. José Sánchez del Águila y León, Auditor de División.
Dado en Palacio á veinte de Agosto de mil ochocientos noventa y ocho.—María Cristina.—El Presi-dente del Consejo de Ministros, Práxedes Mateo Sagasta.

Una vegada acabada la darrera guerra de Cuba, el butlletí del dimecres 22 de març de 1899 ens don les xifres de soldats involucrats en el conflicte a través del  finiquito de  la pagadoria del exercit.

BOPG dimecres 22 Març 1899
MINISTERIOS DE LA GUERRA Y HACIENDA
Exposición
Señora: La deplorable demora que viene sufriendo el pago de los alcances á que tienen derecho las fuerzas repatriadas de las islas de Cuba y Filipinas, no proviene, como con error ha supuesto una parte de la opinión, ni de falta de crédito legislativo, pues se trata de un gasto cuya aplicación á los autorizados para aquellas campañas no admite duda, ni de falta de recursos, porque lo mismo el anterior Gobierno de V. M., que el presente, han estado siempre dispuestos á arbitrar, mediante operaciones de Tesorería los necesarios para atender al cumplimiento inmediato de obligación tan sagrada.
La única causa del conflicto es la inmensa dificultad que ofrece á la Administración militar el reconocimiento y la liquidación individual de aquellos créditos. La división de las fuerzas y el movimiento de las columnas en tan largas y accidentadas campañas, la distinta situación de los Cuerpos, la disolución de unos y la transformación de otros, el crecido número de bajas, la irre-gularidad que esos y otros motivos han introducido en el pago de los haberes y en la contabilidad de los Cuerpos, hacen imposible que, aun con un esfuerzo extraordinario, la administración militar lleve á término la liquidación de los alcances en un plazo inferior á dos años.
Basta decir. Señora, como complemento y justificación de las indicaciones expuestas á V. M., que se trata de reconocer y liquidar derechos devengados durante un término medio de treinta y dos meses á 125.447 repatriados de Cuba, á los causa habientes de 53.572 fallecidos, á 34.853 soldados que pasan á continuar sus servicios en la Península y de otros 9.378 licenciados y bajas ignoradas, pudiendo calcularse en 4.500.000 operaciones nada fáciles de liquidación, el empeño que por tal concepto pesa sobre las oficinas militares de contabilidad.
Madrid 16 de Marzo de 1899 . – Señora: A.L.R.P. De V.M. , Camilo G. De Polavieja . – Raimundo Fernández Villaverde