Guerra hispano-estadounidense. Testimonios y repatriados XXI

Los repatriados

De un momento á otro llegará al puerto de la Coruña el vapor Alicante, conduciendo el primer convoy de soldados repatriados de Santiago de Cuba.

Para algunos infelices, será día de júbilo aquel en que vuelvan á pisar el suelo de la Patria; para otros, acaso día de prueba, porque hallarán en las brisas natales el beso de la madre que perdieron durante la ausencia y cuyos ojos no pudieron cerrar en su lecho de muerte.

Coruña se apresta á recibirlos y á otorgarles un recibimiento digno, con un esmero cumplido para su cuidado.

Para alojamiento de los soldados repatriados, se cuenta con el lazareto de Oza, el Hospital Militar y los cuarteles de Alfonso XII y Santo Domingo.

Se cuenta, además, con locales establecidos en el Parque de San Amaro y con el Sanatorio de la Cruz Roja.

El lazareto de Oza se halla en excelente estado.

Tiene departamentos limpios y habilitados convenientemente, y todo lo necesario para el servicio de los repatriados; pero dado el crecido contingente que se espera, será necesario realizar las obras de ampliación solicitadas.

Hoy se espera que llegue á Coruña el «Alicante» conduciendo la primera expedición de repatriados,

y en lo que resta de semana llegará alguna más á Santander.

En ambos puertos de desembarco se han adoptado precauciones, tanto para evitar el desarrollo de epidemias, como para que se efectúe el desembarco con el mayor orden.

La Unión Católica. 24 de agosto de 1898.

Guerra hispano-estadounidense. Testimonios y repatriados XIX

El ministro de Marina visitó esta mañana al presidente del Consejo para darle cuenta de un telegrama sobre la repatriación de los marinos de la destruida escuadra que se encuentran prisioneros en los Estados Unidos.

Con este motivo los señoras Auñón y Sagasta hablaron de la forma de hacer la repatriación y de los barcos que pueden prestar el servicio, pero no se adoptó ningún acuerdo definitivo, quedando el asunto pendiente de un estudio que someterá luego el ministro de Marina á la aprobación de los demás consejeros responsables.

Datos para la liquidación

Un colega hace los siguientes cálculos:

«Suponiendo que regresen de Cuba 12.000 hombres, costará el transporte de estas fuerzas, con arreglo al contrato del Estado con la Compañía Trasatlántica, treinta millones de pesetas.

Sí se lleva á efecto el acuerdo del Gobierno de entregar tres pagas á oficiales y tropa al desembarcar, ascenderá el desembolso á cuarenta y dos millones de pesetas.

Si se devuelve el material de guerra del ejército de Cuba, no bajará su transporte de veinticinco millones de pesetas.

Si se repatrían por cuenta del Estado también les empleados españoles que allí quedaban y los voluntarios que han luchado como movilizados, la cifra se elevará considerablemente.

A estos datos hay que agregar lo que al ejército de la gran Antílla se le debe, que pasa de trescientos millones de pesetas.

Las cifras son siempre elocuentes.

Sumen, sumen nuestros lectores y verán lo que es bueno.

Nosotros no queremos hacer la operación.

¿Con qué dinero cuenta el Tesoro para estas atenciones?»

Con el crédito, como hasta ahora.

 

La división volante de la escuadra

Madrid, 23, á las 610 tarde.—El general Auñón ha llevado a la firma de la Reina un decreto disponiendo que se disuelva la división volante de trasatlánticos armados y que se haga entrega de los buques á la compañía naviera a que pertenecen con objeto de que pueda ésta destinarlos á la repatriación d e las tropas.

Los buques á que se refiere el decreto son el Ciudad de Cádiz, el Alfonso XIII y el Buenos Aires.

El Joaquín del Piélago, que se halla en Canarias, regresará con el mismo objeto.

Proceder yanki

Madrid, 23, á las 11 noche.—New York, 23.—Un ministro ha declarado que los Estados Unidos no indemnizará á España el valor de las fincas que el Estado español posee en las Antillas.

La Dinastía. Barcelona, 24 de agosto de 1898

 

Los carlistas en 1898 – IV

LOS CARLISTAS

Leemos en La Publicidad de Barcelona:

«La Depeche afirma que los principales jefes carlistas han establecido los cuarteles generales en Bayona y en San Juan de Luz, desde cuyo punto se proponen hacer un movimiento en cuanto haya regresado el ejército de Cuba.

Añade que los agentes de D. Carlos han hecho activa propaganda en la citada isla en estos últimos meses.

La propaganda carlista es tan activa en el departamento de los Bajos Pirineos, que es muy posible que dé lugar á una observación amigable del Gobierno español al francés.

Un telegrama de Biarritz manifiesta que el plan de los carlistas es hacer un movimiento simultáneo en tres regiones:

D. Carlos se pondrá al frente de las fuerzas del Maestrazgo, D. Jaime al frente de las Vascas y D. Alfonso mandará las de Ciudad Real.»

La Depeche termina diciendo:

«Las comunidades religiosas de Filipinas han entregado á los carlistas 50 millones de pesetes y han prometido contribuir con otras cantidades importantes.»

Por telégrafo

Londres 23, 4 t.

E1 corresponsal del Daily Mail en París ha celebrado una interview con el Sr. Melgar, secretario de D. Carlos.

Declaró que el pretendiente no dirigirá ningún manifiesto á sus partidarios ínterin no se firme la paz.

Cuando ésta sea un hecho, D. Carlos hará conocer sus intenciones á los carlistas.

El mismo Daily Mail publica declaraciones del conde de Maillé, en las cuales asegura que los americanos ofrecieron á don Carlos 12 millones de pesetas con la condición de que éste les devolviese doble cantidad al subir al trono.—Reyer.

El correo militar 24 agosto de 1898

Guerra hispano-estadounidense. Testimonios y repatriados XVI

Anoche, á las nueve, fondeó en la Coruña el vapor «Alicante».

El buque fué inmediatamente visitado por el capitán general, los gobernadores civil y militar, el alcalde, el comandante de Marina y el representante de la Compañía Trasatlántica.

Se prohibió en absoluto que nadie se acercase á las inmediaciones del Alicante, cumpliéndose la orden con todo rigor.

Las lanchas de los buques de guerra impidieron que esa diaposición fuese contravenida.

El buque trae la bandera de señales de la Cruz Roja, como su condición de barco hospital demanda. La curiosidad del público que se halla en los muelles es extraordinaria.

Los enfermos proceden del hospital de Santiago de Cuba.

Al aercarse al buque-hospital la lancha en que iban las autoridades, un sepulcral silencio reinaba á bordo del «Alicante».

Pocos instantes después las bordas estaban coronadas de soldados.

Enteradas las autoridades del cuerpo de Sanidad de las condiciones en que viene el buque, se aproximó á éste la lancha de las autoridades.

El capitán general dirigió á los repatriados un saludo en nombre de la regente.

El alcalde les dió la bienvenida en nombre del pueblo coruñés.

Durante la travesía han fallecido las  personas cuyos primero y segundo apellidos publicamos, y que un colega de la mañana publica:

Izquierdo López, Ducais Cortés, Ibarra Martinez, Peláez Prelo, Lovet Cortés, Ponto Villarrasa, Castell Castán, Blanch Estivel, González Gabela, Martín Redondo, Cavero Fabatúe, Lequerica Pereda, Carbonell Cacheis, Zuabeilos Muñoz, Gutiérrez García, Castell Сortellós, Cebrían García, Pardos Andrés, Luis Carneros, Martínez Suárez, Сarrasco Francisco, Díaz y Díaz, Parra Ortega, Gallarte Alamo,García Pavón, Arribas Andrés, Pfernández Bonet, Ponce González, Beira Martínez, Martín Malariu, Fernández López, Font Valleret, López Villanueva, Cherlén Chazo, Sardina Martinez, José Carlos, Fábregas Lledot, Pérez García, Guiblado Caetolid,Granges Pízarro, Sindogorta Cagueta, Pla Roid, Carmona Romero, Pujón Reguera, Pérez Bravo, Coto Llerandi, Díaz Roldan, García Pérez, Jiménez Garrido, Díaz y Díaz, Garcés Morales, García Casanueva, López Alvarez, González Sotello, Miguel Alvarez, Arguenaona Guerrero, Pedro Pablo, Rodríguez Larragueite, Fernández Pérez, Menéndez Caballero.

La prensa de la mañana publica interesantes noticias á las cuales nos remitimos para esta información.

En el «Alicante» han llegado el general Ruiz Ranoy; 38 jefes y oficiales, de los cuales ninguno еs de artillería; el alférez del navio «Reina Mercedes», Sr. Pina; 102 individuos de tropa, pertenecientes á la marina y al ejército.

El número de soldados asciende á 1.000.

Han llegado además 100 que no forman cuerpo en los Institutos armados.

El «Alicante» viene con patente limpia.

Durante la travesía no ha ocurrido defunción alguna por fiebre amarilla, conservando el barco buenas condiciones sanitarias.

Entre los enfermos viene uno grave de paludismo, anemia y debilidad general.

También trae un herido tuberculoso.

El correo español 24 agosto 1898

Guerra hispano-estadounidense. Testimonios y repatriados XVIII

La repatriación

De un momento á otro se espera en La Coruña la primera expedición de repatriados de Santiago de Cuba, que conduce el vapor Alicante,

Se ha pedido al capitán general de El Ferrol orden de desembarco de la mayoría de la tripulación, que asciende á 500 hombres, á fin de que puedan aprovecharse las literas de éstos, quedando el barco trasformado en hospital.

De no hacerse asi, habría pocas facilidades para acomodar á los repatriados, pues sólo se dispone de cien literas de primera clase para los oficiales.

Los soldados tendrían que acomodarse en los corredores de cubierta, colocándose toldos.

En el lazareto todo se halla dispuesto, adoleciendo sólo de la falta de barracones, dado el crecido número de expedicionarios.

El gobernador civil se cuida de todo cuanto le atañe.

E1 alcalde reunió la Junta municipal de Sanidad, adoptando medidas higiénicas que cumplirá el vecindario.

También se reunió la Junta provincial de Sanidad, con asistencia de las autoridades, acordando ajustarse á las disposiciones dictadas.

Se ofició al capitán general de la región, significándole lo mucho que se espera de él para que nada falte á los repatriados.

Hablase de que vendrá de El Ferrol la fragata Almansa, acondicionada para recoger á los repatriados cuando abandonen el lazareto y el Patriota.

Para los soldados que queden en ésta hay dispuesto alojamiento.

Ademas del Hospital Militar, están los cuarteles Alfonso XII y Santo Domingo, el parque de San Amaro y la antigua fábrica del barrio de Santa Lucía.

El alquiler de este último edificio y de la Plaza de Toros lo abona el Ayuntamiento, costeando también las obras de reparación que se efectúan en el parque.

La Plaza de Toros fué alquilada para alojar dos baterías de artillería del 14 regimiento, que regresaron á Madrid en dos trenes militares.

Si hubiera falta de local, se alojarían los soldados en las casas.

El capitán general del distrito proyecta, en último extremo, que la Infantería pasa á Betanzos, para desalojar por completo el cuartel de Alfonso XII.

El Ayuntamiento tiene fletado un vapor para salir á esperar á la entrada del puerto al Alicante.

Se cuenta también para el alojamiento de los repatriados con el Sanatorio de la Cruz Roja.

El gerente de la Compañía Trasatlántica se hará cargo en El Ferrol de los cruceros auxiliares Ciudad de Cádiz y Alfonso XIII, cuyos buques saldrán Inmediatamente para la isla de Cuba.

Coruña 23 (9,30 noche).—Fondeó el vapor Alicante á las nueve de la noche en el lazareto.

Debido á lo avanzado de la hora, retiráronse el Ayuntamiento, las comisiones, las autoridades y el pueblo.

Además, las enfermedades contagiosas que padecen los repatriados impiden el acceso á bordo.

Cónstame que los pacientes de la fiebre amarilla irán al lazareto Oza á purgar toda la cuarentena.

Otros pacientes estarán cinco días en barcos-hospitales, después del lazareto, para marchar á sus casas.

La gente sana quedará aquí esperando la orden de destino.

Hay ansiedad en la gente por temor á la fiebre amarilla, y á la par deseo de ser útiles á los repatriados.

Las autoridades militares y civiles, y especialmente el gobernador, Sr. Martos, brillan por su celo y actividad.

Mañana se hará el escolmo de los repatriados que estén graves, leves y sanos, para dárseles destinos.

Telegrafiaré el destino respectivo.

(Mencheta.)

El Globo. 24 agosto 1898

 

Guerra hispano-estadounidense. Testimonios y repatriados XVII

Los barcos hospitales

Cuando celebró sus reuniones el Consejo Superior de Sanidad, hicimos notar los inconvenientes de utilizar barcos para hospitales de repatriados cuarentenarios. Nuestras observaciones no se tuvieron en cuenta, porque no los firmaba ningún sabio de los muchos que abundan en los consejos técnicos, además ¿quién se atreve á emitir una opinión contraria á las autoridades eminentes de la ciencia? Basta que se haga una indicación razonable, para acordar lo contrario, y así anda ello.

Aquellas nuestras observaciones se han confirmado por fortuna para nosotros, por desgracia para los sabios.

Dos telegramas, con rara coincidencia, anuncian desde la Coruña que aquellos barcos destinados á hospitales son, además de insuficientes para alojamiento determinado, inútiles y sin condiciones de holgura necesaria para la asistencia que requiere el enfermo, y la vida higiénica á que debiera sujetarse aquel organismo medio destruido por la fiebre en los asfixiantes campos de Cuba.

Y no ya solo resultan inútiles los barcos para este servicio, sino que no están construidos para servir de hospitales flotantes.

Hubiérase habilitado un campamento en Ibiza, hubiérase tomado como punto de cuarentena las islas Cies de Vigo, como dijimos cuando el Consejo de Sanidad discutía precauciones para los repatriados, y no se tropezaría en los momentos angustiosos del desembarque con que ni pueden estar los enfermos en los camarotes de los barcos, ni con libertad respirable en el lazareto de Oza.

Cuestión eterna de nuestra administración general. Desatender observaciones de las gentes y acordar aquello que inspiró la vanidad y el Yo. Y cuando se tocan las consecuencias del error y de la torpeza deprisa y corriendo habilitar alguna medida para salir del paso, aunque perezcan…los principios.

 

El Dia. Madrid. – 24 agost 1898

Guerra hispano-estadounidense. Testimonios y repatriados XV

TROPAS DE REGRESO

El Alicante en la Coruña

Anoche á las nueve fondeó en el Puerto de la Coruña el vapor de la Compañía Trasatlántica Alicante.

Immediatamente se dirigieron al buque en una lancha del cuerpo de Sanidad militar el capitán general, los gobernadores civil y militar, el alcalde, el comandante de Marina y el representante de la Compañía Trasatlántica.

Se prohibió en absoluto que nadie se acercase á las inmediaciones del Aliante.

Las lanchas de los buques de guerra pidieron que esa diaposición fuese contravenida.

A bordo del Alicante regresan el general Ruiz, y treinta y ocho jefes y oficiales, de los cuales ninguno es de Artillería; el alférez del navio Reina Mercedes señor Pina; 102 individuos de tropa, pertenecientea á la marina y al ejército.

El número de soldados asciende á mil. Vienen además cien que no forman cuerpo.

El Alicante trae patente limpia.

Durante la travesía ocurrieron 60 defunciones, entre éstas las de un jefe y un oficial.

Todos los enfermos que regresan proceden del hospital de Santiago de Cuba.

Al acercarse al buque hospital la ancha en que iban las autoridades, un sepulcral silencio reinaba á bordo del Alicante .

Pocos instantes después las bordas estaban coronadas de soldados.

Enteradas las autoridades del cuerpo de Sanidad de las condiciones en que viene el buque, se aproximó á éste la lancha de las autoridades.

El capitán general dirigió á los repatriados un saludo en nombre da la Regente.

El alcalde les dio la bienvenida en nombre del pueblo coruñés.

El capitán general dió algunas instrucciones al jefe militar de la expedición.

Es director del hospital flotante el subinspector de primera clase D.Lorenzo de Castro.

El jefe del servicio es el subinspector de segunda clase D. Gavino Rivadella.

Los médicos mayores son los señores Mendoza, Sambral y Fernández; los médicos segundos los Sres. Iñigo y Agudo.

Los farmacéuticos, Sres. Fernández y Díaz.

Forman parte, además de ese personal médico-farmacéutico, treinta y dos sargentos y treinta y un sanitarios.

El director del hospital flotante dio cuenta al capitán general de las novedades ocurridas en la travesía.

Dijo que no necesitaba más personal para el servicio de los repatriados, pues el que tenía era suficiente para atender á todas las necesidades que impusiese la cuarentena.

Ignórase todavía dónde sufrirán la cuarentena el comandante y expedicionarios del Alicante.

El comandante del Patriota fué al Ferrol para consultar si se hacía cargo de los expedicionarios

E1 jefe del departamento le manifestó que carece de instruciones hasta que llegue la escuadra de Cámara, á la que dicho buque pertenece.

La real orden dispone que sólo vayan al lazareto los inválidos y convalecientes de fiebre amarilla.

Como no viene ninguno, pueden los expedicionarios pasar al Patriota, pero la Trasatlántica ha manifestado que puesto que este buque carece de sitio donde acomodarlos, si la cuarentena sólo ha de ser de cinco días pueden hacerla en el Alicante.

Se ha demorado la salida de éste, creyéndose que irán todos al lazareto.

A bordo del Alicante hay dos muertos.

El correo militar 24 agosto 1898

Guerra hispano-estadounidense. Testimonios y repatriados XIV

Coruña 23,8 n.

Acaba de comunicar el vigía de Monte Alto que se halla á la vista del puerto el vapor Alicante, que conduce la primera expedición de repatriados.

La noticia circula rápidamente, el público, dominado por una gran ansiedad, comienza á invadir los muelles.

A causa de lo intempestivo de la hora, se cree que el desembarco será aplazado hasta mañana.

En el lazareto tienen cabida 638 personas cómodamente.

En el puerto se halla el trasatlántico Ciudad de Cádiz, procedente del Ferrol, que zarpará mañana para la Habana.

Ha dejado de ser crucero auxiliar y al efecto ha desembarcado en el Ferrol su tripulación de guerra y el armamento.

El trasatlántico va al mando del capitán D. Benigno Lavín.

En el Patriota se está procediendo á la colocación de camas.

Las autoridades se disponen á ir á visitar el buque.

Coruña 23. 9’23 a.

El Alicante fondeó sin novedad en las inmediaciones del lazareto de Osa á las ocho y cuarenta y cinco minutos.

Nadie ha comunicado con el trasatlántico.

Fueron bastantes los botes y lanchas de vapor que salieron al encuentro del barco con gente que esperaba llegasen en él parientes ó amigos.

En alta voz se pedían nombres de barco á barco y noticias de los ausentes.

Las autoridades habían tomado rigurosas medidas para que ninguna embarcación se acercase al vapor una vez fondeado éste.

Vienen bastantes atacados de fiebre amarilla, y mañana á primera hora se hará la clasificación de los enfermos.

Los graves pasarán integra la cuarentena en el lazareto.

En el Patriota serán recogidos los enfermos de males comunes y no contagiosos.

Reina gran actividad en las oficinas militares para ultimar la distribución de las fuerzas recién llegadas.

Tanto el gobernador militar como el civil despliegan una actividad y un celo digno del mayor aplauso.

Todas las clases sociales están animadas del mejor espíritu para hacer grata la estancia aquí de los que han expuesto su vida por la patria. M. Dafonte.

La correspondencia de España 24/08/1898

Guerra hispano-estadounidense. Testimonios y repatriados XIII

La repatriación

Telegrama oficial

Santiago de Cuba 20.

Seis tarde de ayer, salió para Coruña vapor Isla de Panay, conduciendo general Ordoñez, batallón Andalucia, dos escuadrones de caballería Rey, fuerzas de artillería, ingenieros y enfermos marina.

Total, tres jefes, 95 oficiales y 1…. tropa.

Mismo día y hora salió para Vigo vapor Villaverde con batallón cazadores Puerto Rico núm. 19 y segúndo voluntarios Cuba.

Total, 3 jefes, 49 oficiales y 565 tropa.—Toral.

La correspondencia de España 23/08/1898

Guerra hispano-estadounidense. Crónica de la guerra XVII

Más que Crónica de la guerra debiera titularse esta crónica de la paz, porque desde el día 12 en que se firmó en Wáshigton el Protocolo puede decirse que la paz es un hecho, faltando ahora solo discutir algunas cuestiones de detalle relacionadas con las condicioncs en dicho protocolo contenidas.

Por la importancia y trascendencia que tiene el mencionado documento, importancia y trascendencia que no hemos de encarecer desde el momento en que el protocolo abre un nuevo período á la historia de España, creemos oportuno reproducir el texto oficial del mismo.

La Ilustración artística, Barcelona 22 de agosto de 1898